¿Existe el lavado de cerebro o es solo un mito?

El lavado de cerebro es una herramienta para manipular la mentes de los individuos. Aplicada por primera vez durante la llamada «Revolución Cultural».

Cuando algún pariente o conocido se inicia en alguna religión y de pronto cambia su conducta, es como si fueran otra persona, y hacemos el típico comentario «le lavaron el cerebro en ese lugar». Pero para que quede claro, este fenómeno existe y se compone de protocolos muy definidos.

Desde hace 70 años se hace mención del lavado de cerebro, aunque los experimentos para manipular la mente se vienen realizando desde mucho antes, fue en los años 50 cuando se sistematizo un método que permite «reprogramar» el cerebro.

Edward Hunter, periodista y agente de la CIA fue el primero en hablar del lavado de cerebro. Luego se convirtió en un tema tan controversial que fue el tema de grandes novelas como 1984 y de películas como «El huevo de la serpiente«. Esto hizo que el tema se vinculara más con la ficción.

“Aislamiento, control, incertidumbre, repetición del mensaje y manipulación emocional son técnicas utilizadas para lavar el cerebro”.

Eduard Punset

Historia sobre el lavado de cerebro

Durante la guerra de Corea en contra de lo Estados Unidos, muchos se mostraron sorprendidos ante la conducta de los soldados que regresaban tras haber sido prisioneros. Sus ideas y conductas eran distintas, muchos se quedaron en el bando del país enemigo.

Hunter decidió estudiar lo que ocurrió con sus compatriotas, encontrando información de un mecanismo dasarrollado por China para reprogramar la mente de su pueblo.

La nación oriental transmitió el conocimiento a los coreanos quienes lo aplicaron a los prisioneros de guerra.

Así se descubrió que el lavado de cerebro es diferente a la tortura. Aunque la tortura interviene en algunos procesos de esta técnica.

¿Cómo lavar un cerebro?

Se sabe que existen 4 mecanismos, para lograr que una persona cambien sus creencia y actitudes frente al mundo. Por medio de la persuasión racional, la sugestión, la tortura y el lavado de cerebro.

Solo en la persuasión se emplea una relación entre iguales, en las otras tres es necesario someter al individuo. Para llevar a cabo un lavado de cerebro, se emplea los siguientes mecanismos:

  • Control total de la comunicación de un individuo con el mundo externo.
  • Imposición de castigos físicos o psicológicos frente a la desobediencia. Se imponen unas pautas de conducta y si no se siguen, se acude a alguna forma de tortura.
  • Inducción a confesar. Se le impide al individuo tener una vida privada.
  • Recompensas por obedecer. Se le hace creer que al obedecer a un poder la persona se está protegiendo de males mayores.

Propaganda de dogmas, que se hacen ver como perfectamente racionales. Son mandatos muy precisos.

  • Simplificación de la actividad intelectual, para impedir la abstracción y el pensamiento crítico.
  • Otorgamiento a otro, del derecho de controlar la vida y el destino, por “nuestro propio bien”.

Estos mecanismos manipulan las necesidades humanas de seguridad, pertenencia y protección. La pérdida de libertad en función de otro termina viéndose como un mal necesario, para ganar estabilidad y tranquilidad.

El papel de la coerción

Para que el lavado de cerebro sea posible debe recurrirse a la coercion, que es la acción de reprimir moral y físicamente a una persona. De lo contrario el ser humano se resistirá a perder su autonomía e identidad.

La forma para romper la resistencia de un individuo es introducir emociones fuertes. A la par se incrementan notablemente los niveles de estrés.

Con el avance de las tecnologías y los estudios realizados sobre el tema, se hace mucho mas fácil realizar el lavado de cerebro de manera masiva y de forma mas imperceptible. Muchos individuos se someten voluntariamente a estos poderes sin oponer resistencia.

El consumismo puede ejemplificar este hecho de manera muy concreta, de la misma forma la dependencia a los celulares y las redes sociales.

Es tan eficaz que muchos no nos fijamos apenas nos percatamos que estamos siendo sometido. Al contrario pensamos que al expones nuestras vidas privadas en linea demuestra nuestro libre alberdrio.