Cuidarnos es lo primero, sino nadie lo hará

A lo largo de la vida nos preocupamos por nuestro entorno, las relaciones que desarrollamos y el vínculo que nos une con las personas que apreciamos olvidando de cuidarnos nosotros

Sin embargo, en ocasiones tendemos a olvidar que la persona más importante en tu vida eres tú mismo. No, no se trata de un acto de egocentrismo o narcisismo, se trata de aprender a cuidarte, valorarte, y quererte antes de dedicarte a los demás.

Existen personas que aman y cuidan de quienes le rodean, hasta el punto de agotarse mental y físicamente, esperando que su entorno sea capaz de devolverle el aprecio que otorga. Dar esperando amor esperando ser amado con la misma devoción, puede terminar en una gran decepción. ¡Aprendamos a cuidarnos! Es lo nuestra meta.

Esta es una filosofía de vida bastante arriesgada y para nada recomendada, ya que nadie es indispensable para tu felicidad, por lo que depender del cariño o reciprocidad de los sentimientos de otras personas, puede llegar a afectar negativamente tu autoestima y confianza.

Jorge Bucay expresó que nadie puede crecer por nosotros, y no se equivocaba. Todos los seres humanos somos únicos, con pensamientos, sentimientos, deseos, prioridades, experiencias, vivencias, emociones y con diferentes puntos de vista. Por ello, depender al 100% de otra persona, es un atentado contra tu propia persona.

Para amar al resto, debes aprender a amarte a ti mismo, es una frase muy conocida y con un mensaje muy realista. ¿Cómo puedes hablar de amor, aprecio y cariño, si no aplicas estos conceptos a ti mismo?

Aprendamos a cuidarnos, y podrás cuidar a los demás

Las relaciones que construimos a lo largo de la vida son importantes para cada individuo. Estas forman parte de tu vida, de tus recuerdos, causan risa y llanto, y alegran tu alma y tu corazón, son tu soporte, quienes te acompañan y apoyan en tus triunfos y fracasos.

Por esta razón a veces pensamos que las personas son irreemplazables, y que debes evitar que se vayan o se alejen de ti, llegando a aferrarte a esos lazos, incluso cuando estos puedan causar dolor. Olvidando por completo cuidarnos.

Esta concepción es errónea, los humanos evolucionamos y cambiamos, nos adaptamos, crecemos y aprendemos a ver el mundo desde otra perspectiva. Así que la soledad o la separación no es el fin del mundo, nuevas personas llegaran a tu vida, con nuevas experiencias, historias, desafíos y aventuras.

Lo realmente importante es aprender a aceptarte, encontrar y descubrir tu propio valor, respetarte, ser sincero y fiel contigo mismo, hasta que puedas amarte, sin la necesidad de que otros lo hagan por ti.

Acerca del autor

Pedro Lisperguer

Más conocido como Lysander, es Autor, Blogger Apasionado, Facilitador Mindfulness y Desarrollo Humano, además es Seo en Sensei digital Agencia de Marketing dedicada a crear y promover proyectos que aportan valor a la sociedad.

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