No te imaginas todas las actividades que se realizan relacionadas con la placenta de tu bebé, descubre lo que hacen alrededor del mundo con ella
Un embarazo, dependiendo de la cultura en la que este se dé, puede ser visto de diferentes maneras, para algunos es solo un embarazo pero hay otras religiones que tienen ciertas costumbres las cuales ponen en práctica con las mujeres embarazadas.
Seguramente has escuchado acerca del embarazo y de los múltiples mitos y costumbres que se tienen en otros países cuando de este se trata, muchos de ellos involucran a la placenta de la madre, algo bastante extraño para muchos.
La placenta, como sabemos es el saco dentro del cual se gesta el bebé durante el embarazo y esta, el día del nacimiento del bebé, es expulsada por la madre también, o retirada, muchas veces es desechada pero en otras costumbres esta tiene otro fin.
Hoy nosotros te estaremos hablando acerca de la placenta y de las múltiples tradiciones o rituales que se hacen con ella después del nacimiento del bebé así que si te interesa esta información, sigue leyendo este post que hoy traemos para ti.
Costumbres que involucran la placenta
Sabemos que en el mundo son muchas las religiones que se profesan, asimismo sabemos que es muy común que se hagan rituales o tradiciones que para muchos de nosotros pueden ser bastante fuera de lo común, y si se involucra la placenta pues aún más ¿cierto?
En los animales, es muy normal ver como después del alumbramiento de sus crías, el animal se come su placenta, algo a lo que se le denomina como placentofagia pero que esto lo haga una mujer o alguien más, puede ser aberrante según la opinión de muchos.
Es probable que hayas escuchado de personas que se hayan comido la placenta y creas que es una mentira pero no, hay incluso mujeres famosas que lo han hecho, incluso hasta Kim Kardashian lo ha hecho, y esto no se trata de canibalismo, cabe destacar.
Por años, el órgano que mantiene con vida al bebé durante la gestación, ha sido venerado y es porque mantiene a la madre y al bebé juntos, brinda protección y vida y dado a esto, esta cultura se ha extendido hasta Chile.
Aunque en Latinoamérica esto sea bastante extraño, en Chile ahora las madres podrán pedir sus placentas luego del alumbramiento del bebé, sin importar si nació en una clínica privada o un hospital público, ya que ahora la placenta se considera como un órgano y no como un desecho.
Muchos dicen que esto de llevarse la placenta puede ser parte de un ritual simbólico pero también se dice que puede haber beneficios en ello, pero ¿es esto cierto?
La placenta es un símbolo de vida y representa la unión de la madre con el bebé y son muchos los rituales que se llevan a cabo con esta.
En el caso de los Mapuches, cuando una madre dar a luz, una de las parteras mapuches la observa con detenimiento y la lee para así describir el futuro del recién nacido y luego de ello, esta es envuelta en un paño con hojas de ajenjo y se entierra en una celebración familiar, bajo un árbol frutal o nativo con el fin de que el niño quede protegido de los malos espíritus y crezca con fortaleza física y protección diaria.
Los rapa nui, también tienen sus rituales para celebrar el nacimiento de un niño y uno de ellos es enterrar este órgano junto a un árbol y todo para que tal y como crezca el árbol así también lo haga el niño o niña nacido.
Los asiáticos tampoco escapan de estos rituales y es que en Indonesia colocan este órgano dentro de un envase decorado y lo cuelgan en un árbol, el día en que el dueño fallezca, lo entierran con el.
Malasia también tiene su forma de ver la placenta, para ellos este órgano es una especie de hermano del recién nacido y se cree que este se reúne con su dueño una vez este muere, por ello después de cada nacimiento, la placenta y el cordón umbilical, se lavan y se envuelven en un paño blanco y se siembra en tierra fértil.
Otros más la entierran en el lugar donde nació el bebé y todo esto es para que el niño jamás olvide sus raíces, respete su tierra natal y sus orígenes.
Así como están estos rituales, hay mujeres que simplemente las consumen ya que según esta tiene beneficios, que cabe destacar no han sido comprobados a nivel científico pero se cree que ayudan a:
- Aliviar y prevenir la depresión post parto
- Reducir el sangrado después del alumbramiento
- Incrementa la producción de leche materna y da energía a la madre.
- Aumenta el hierro por lo que combatiría la anemia
- Nivela las hormonas regresándolas a su estado normal.
- Favorece a la cicatrización y la mejora en la calidad de la piel
- Aporta vitalidad a quien la consuma
Al parecer esto puede ser cierto y es que se estudiaron a mujeres que las habían consumido y se encontró que estas tenían 11 aminoácidos más en la sangre que propician la producción de hormonas, proteínas, neurotransmisores, mejoran la actividad de la vitamina K, es antihemorrágica y contiene oxitocina lo que mejora la contracción del útero.
¿Qué opinas de esto? ¿Tú, consumirías tu placenta?
Gracias por leernos.