¿Qué es la esclerodermia y cómo se trata?

La esclerodermia afecta al tejido conectivo en general. Y esta es la parte más importante del cuerpo: forma el marco de soporte (estroma) y el tegumento externo (dermis) de todos los órganos internos.} Forma parte de las paredes de los vasos sanguíneos y los músculos, incluido el corazón, proporciona aislamiento para los nervios, fibras, y está contenida en las membranas del cerebro. Pero, ¿Qué es la esclerodermia? ¿Cuál es el tratamiento para la esclerodermia? Son preguntas muy importantes debido a que esta enfermedad puede ser mortal, pero extrañamente en algunos casos desaparece por sí sola.

¿Qué es la esclerodermia?

Si nos preguntamos ¿Qué es la esclerodermia? Es una enfermedad autoinmune rara que causa la formación de parches duros y estirados en la piel. Este síntoma dio nombre a la enfermedad: en griego, “esclerodermia” significa “piel dura”.

Sin embargo, los cambios en la piel no son el único síntoma de la esclerodermia. Debido a que como afecta al tejido conectivo en general, también puede afectar a los órganos internos de nuestro sistema.

Dependiendo de qué tan lejos haya llegado el daño al tejido conectivo y qué elementos del cuerpo hayan sufrido más, los médicos distinguen varios tipos de esclerodermia.

Tipos de esclerodermia

Hay dos tipos principales de esclerodermia: esclerosis localizada y sistémica. A su vez, también tienen diferentes formas, que difieren en síntomas y pronóstico.

Esclerodermia localizada

Esta es la forma más leve de la enfermedad, en la que solo se ve afectada la piel. Por lo general, afecta a los niños, pero puede ocurrir a cualquier otra edad.

Los dos tipos más comunes de esclerodermia localizada son: la esclerodermia línea y la morfea circunscrita.

Esclerosis sistémica

En este caso, la esclerodermia afecta no solo la piel, sino también el sistema circulatorio y los órganos internos. Este tipo afecta con mayor frecuencia a mujeres de entre 30 y 50 años. Es extremadamente raro en niños.

¿De dónde viene la esclerodermia?

Ya sabemos que es la esclerodermia, pero esto abre otra pregunta, ¿Qué causa la esclerodermia? Bueno, es causada por que la producción de colágeno aumenta en el cuerpo, y esta proteína que crea fibras fuertes comienza a acumularse en los tejidos. Pero los investigadores aún no han descubierto qué causó la producción anormal de esta sustancia.

Parece que el proceso está asociado con disfunciones en el sistema inmunológico, por lo que la esclerodermia se clasifica como una enfermedad autoinmune. 

Sin embargo, se supone que la genética también juega un papel (la esclerodermia a menudo se hereda) y la exposición a factores externos. Los desencadenantes de la enfermedad pueden ser infecciones virales, tomar ciertos medicamento o contacto repetido con diferentes químicos.

Tratamiento para la esclerodermia

Desafortunadamente, no existe una píldora mágica contra la enfermedad.  El tratamiento para la esclerodermia generalmente se enfoca en controlar los síntomas y reducir el riesgo de posibles complicaciones.

Para una persona diagnosticada con esclerodermia, un médico puede recetar los siguientes medicamentos (por supuesto, dependiendo del tipo y de los síntomas):

  • Tabletas o cremas tópicas que contienen esteroides. Estos remedios ayudan a reducir la hinchazón y el dolor en las articulaciones, suavizan la piel endurecida y retrasan el desarrollo de nuevos cambios en la piel, por lo que suele ser parte del tratamiento para la esclerodermia más efectivo.
  • Remedios para la hipertensión. Estos medicamentos dilatan los vasos sanguíneos y ayudan a prevenir algunos problemas pulmonares y renales, además de aliviar la enfermedad.
  • Inmunosupresores. Estos son medicamentos que suprimen la actividad excesiva del sistema inmunológico.
  • Tabletas que reducen la acidez del estómago. Ayudan si el sistema digestivo está afectado y la persona sufre de acidez estomacal.
  • Ungüentos antibióticos. Se prescriben si aparecen úlceras en los dedos debido a la enfermedad de Raynaud.
  • Analgésicos. Incluso con receta, si las áreas dañadas de la piel y las articulaciones duelen, y los analgésicos convencionales a base de paracetamol o ibuprofeno no ayudan.